viernes, octubre 17, 2008

Aventuras en la banca mundial: ¡ Zombies!

Los gobiernos del todo el mundo han descubierto su nueva pasión: la exploración de misteriosas bóvedas bancarias. Con cientos de funcionarios entrando y explorando los cavernosos libros de contabilidad de las entidades financieras vía nacionalización, es hora de empezar a repasar qué podemos esperar después de todo este ruido y furia.

Para empezar, parece que el mercado de crédito está volviendo lentamente (demasiado lentamente) al mundo de los vivos. Los tipos de interés en el sistema interbancario están bajando lentamente, las bolsas están recuperando el pulso (siguen nerviosas y aún nadie les ha hablado que estamos en una recesión... silencio) y parece que las cosas se han calmado un poco.

¿El peligro ya ha pasado, entonces? La verdad, no. Ni por asomo. Empecemos por echarle un vistazo a lo que hacen los bancos con el dinero que han recibido en Estados Unidos. La nacionalización parcial americana es de hecho sólo una aportación de capital; las acciones que el Tesoro ha comprado no tienen derecho a voto. Eso significa que los bancos están relativamente seguros, pero no tienen ningún incentivo real para echar a andar. El patio no está para riesgos, y el gobierno les mantiene a flote.

El resultado es predecible; los bancos se han ido a su rincón con su manta de seguridad preferida y se han quedado ahí, sin hacer nada. Tienen capital, pero no tienen a ningún accionista que puede empujarles a utilizarlo. La economía está camino de la recesión, de todos modos. El riesgo en el sistema financiero es que los bancos en Estados Unidos se comporten como lo hicieron los bancos japonenes en los noventa; utilizando la precisa terminología de Brad Delong, el ataque de los bancos Zombie. Entidades seguras, gracias a un cheque en blanco de inyecciones públicas de capital, pero totalmente apáticas y sin el más mínimo ánimo de poner dinero en ningún sitio, ya que la economía anda en recesión, y no creen que les dará ningún beneficio.

En (casi toda) Europa, los gobiernos han entrado en los bancos con voz y voto; en teoría, eso debería evitar que esto suceda, a costa de tener a políticos empujando a los bancos a hacer banca populachera. En Estados Unidos, veremos poco.

Por cierto, la economía está en recesión por aquí, eso no lo duda casi nadie. Producción industrial en descenso, menos ventas al por menor... La crisis financiera ha sido el prólogo. Veremos qué sucede ahora.

5 comentarios:

R. Senserrich dijo...

Imprescindible el artículo de Krugman hoy en el Times, por cierto:

http://www.nytimes.com/2008/10/17/opinion/17krugman.html?hp

Citoyen dijo...

Fantástico post egócrata. El escenario se presta mucho a analogías; tu amigo que se vuelve loco, lo de bajar a tumbas malditas, leer libros demoniacos,...

¿Quién dijo que haber pasado tu adolescencia jugando a Chulu como Dj en vez de tener amigos como los niños normales no te serviría de nada en la vida real, verdad? Recuerdas aquél texto que te pasé sobre como sobrevivir en la llamada de Cthulu? Es hora de usarlo.

mitcoes dijo...

Que se puede esperar de un país cuyo banco central es privado. La que se avecina probablemente será una inflación que consiga que las hipotecas no sean superiores al valor de los inmuebles. Pero si no se financian ni las compras de coches mal lo vamos a pasar. Si los bancos europeos que sacaban pecho han traicionado Basilea con contabilidad creativa y NADIE VA A LA CÁRCEL y en USA mucho menos la confianza en el estado de derecho se va a ir al carajo. Ahora bien, yo creo que en España hay demanda de vivienda y de automóviles - los dos bienes que tiran más del PIB -, que además ha sido diferida por la falta de liquidez bancaria, que en cuanto escampe la crisis financiera van a volver a tirar del carro.

J.E. dijo...

Todos sabemos que en la Llamada de Cthulu la habilidad más importante era 'atletismo'... el equivalente financiero-bancario sería... euh...

En esta crisis ni las analogias frikico-roleras estan claras, maldita sea.

PD: Felicidades por Neoprogs. Hace bastante tiempo que os seguia a cada uno por vuestro lado, y me habeis facilitado bastante el trabajo arrejuntandoos.

Anónimo dijo...

La Reserva Federal no es privada. Ni de broma.