viernes, enero 11, 2008

Repaso (realista) a una legislatura: de la crisis (II)

Es curioso el triunfalismo de algunos cuando llega un crisis. Lo que es más curioso, sin embargo, es cómo los agoreros leen las presuntamente catastróficas previsiones que se van haciendo públicas estos días.

Poneros hace 15 o 20 años. Si alguien os dice que la economía española va a sufrir una crisis en que la inflación va a llegar al 4,5% en el peor de los casos, estabilizándose en un 3% al final de año os entraría la risa floja. Crisis en los ochenta quería decir hablar inflación de al menos dos dígitos, no estas chorradas. Si os dicen además que la catástrofe se verá completada con un atroz crecimiento del 2,2% en el peor de los casos, uno se preguntará si están hablando de Suiza. Una crisis de verdad, una crisis de hombres, es estrellarse con crecimiento negativo de verdad, no lloriquear porque no pasamos del 3%.

Y no hablamos del paro. Un 10% con las tasas de actividad rozando el 60% de la población activa, en comparación a los 20% y apenas llegando al 50%; o déficit público de décimas, no déficit público por encima del 5% del PIB. Y todo eso, repito, en previsiones pesimistas.

Sí, la economía va algo peor que en los últimos años. Sí, está creciendo "sólo" al 3,5% en el último trimestre, en comparación al 4% de hace medio año. La cuestión es, estamos teniendo una crisis en el 2008 que en países como Francia o Alemania serían un año aceptable en los últimos diez años, y que en Estados Unidos sería visto como un suave ciclo económico. Estamos hablando de un frenazo de la economía parecido al del 2001 bajo Aznar, con la diferencia que esta vez los precios de la vivienda estarán bajando.

Aunque las cosas no van tan bien como deberían, es importante mantener la perspectiva.

Una última nota sobre otros datos que andan produciendo felicidad a ciertos sectores de la derecha; en este caso, los de evolución de las cifras de igualdad. Según lo que leen, hasta el 2006 estos habían empeorado. Empeorado muy, muy, muy ligeramente, y eso a mitad de legislatura. No sólo eso; empeorado poquísimo en un contexto donde la población estaba (y está) creciendo con ganas debibo a la inmigración. Recordemos que los recién llegados entran en la economía a nivel de ingresos cero, y normalemente empiezan a trabajar con salarios por debajo de la media; aún con esta presión a la baja, la cifra apenas ha variado.

Y eso sin mirar los detalles, que es donde está la información relevante (el índice de Gini es muy torpe demasiado a menudo). Los datos de salud han mejorado (nota al margen: en EUA están empeorando), los problemas económicos de las familias españolas han disminuido (derivado en parte del aumento de las tasa de actividad, por cierto; hay muchas más mujeres trabajando) ; y todo eso sin contar los años con la mayor tasa de crecimiento de los gobiernos Zapatero.

Si estos son los datos de un gobierno "fracasado" y una economía "en crisis"... en fin. Seguiré hablando de las políticas del gobierno sector por sector esta tarde, pero es importante mantener cierta perspectiva. El "desastre" es tener una crisis parecida a lo que tendría Suiza, Canada o Austria en sus años de gloria. Anda que el país no ha cambiado.

2 comentarios:

Alex Guerrero dijo...

Es un asunto complejo el de la desigualdad en España. Ciertamente ha aumentado ligeramente, como apunta Mikel Buesa en el artículo de Libertad Digital citando a Eurostat.

Donde yerra es en las fuentes de aumento de la desigualdad: no es, como quiere hacernos leer entre líneas, la política de impuestos y gasto social la causante del aumento de la desigualdad (al contrario, la amortigua), sino probablemente la mayor transferencia de riqueza que está viviendo este país en todo el siglo, de clases trabajadoras y medias a ricos y fondos de inversión: el boom immobiliario.

Quienes poseían renta para invertir en ladrillo en 1999-2001 pudieron aprovechar el boom para vender casas a precios desorbitados durante 2002-2006, con lo que estaban redistribuyendo regresivamente de manera masiva de pobres a ricos (vía Bancos y Cajas, claro). El "premium" de haber tenido dinero en el momento apropiado (o lo que es lo mismo, ser afluente en 1999-2001) se convierte en un precio más elevado, extra, que a quien no tenía dinero ni vivienda entonces le toca pagar al primero en el segundo periodo.

Prometo no escribir más recién levantado. Lo juro. :)

Anónimo dijo...

eso me parece a mi. Crisis es el 15% de inflación que hay acá en la argentina. La q se prepararia si eso pasara en ESpaña, juas