Según Merrian-Webster, la empresa editora de diccionarios, "blog" es la palabra del año 2004 en Estados Unidos. Arrodillados ante los nuevos amos digitales. BTOD llegó tarde, pero llegó. En el año del blog, incluso dos tarados como nosotros podemos estar a la moda.
El porqué de esta elección viene de la campaña de las presidenciales. Sitios como Instapundit, Wonkette o Crooked Timber han marcado gran parte la cobertura de estas elecciones. Los blogs conservadores han hecho filetes literalmente a Dan Rather, presentador en la CBS, los demócratas hicieron grande a Howard Dean, y el cachondeo del grito ayudó a fusilarle. Aún no hay demasiados estudios fiables del peso real de los blogs en la información política, pero parece bastante claro que han conseguido, en ocasiones, tener un peso significativo en la agenda.
Como muestra de su importancia, hay algunos economistas y científicos sociales de prestigio que están empezando a publicar los suyos. Para la mayoría, DeLong, Roubini, Gary Becker o Brian Leitler no significan (aún) gran cosa. Los cuatro son académicos de cierta reputación, y los cuatro mantienen blogs tratando de explicar cosas complicadas de manera sencilla. Como todo en internet, es difícil discernir lo bueno de la fantaciencia, pero me parece que los habitantes de la torre de marfil pueden ser algo más utiles si tratan de explicar lo que saben.
A lo mejor la revolución digital era esto. O no.
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